La recuperación es mucho más que alejarse. A veces significa aprender a quedarse y tratar. Se trata de construir y mantener las relaciones que funcionan.

Los problemas y conflictos son parte de la vida y las relaciones -con amigos, familiares, seres queridos, y en el trabajo-. La resolución de problemas y la negociación de conflictos son las habilidades que podemos adquirir y mejorar con el tiempo.

No estar dispuesto a abordar y resolver problemas en las relaciones conduce a sentimientos no resueltos de la ira y la victimización, las relaciones terminan, los problemas no resueltos, y hay juegos de pode rque intensifican el problema y nos hacen perder tiempo y energía.

No estar dispuesto a enfrentar y resolver problemas significa que puede funcionar en ese problema otra vez.

Algunos problemas con la gente que no se puede resolver de una manera mutuamente satisfactoria. A veces el problema es un asunto de las fronteras que tenemos, y no hay espacio para negociar. En ese caso, tenemos que entender claramente lo que queremos y necesitamos y cuál es nuestra línea de fondo.

Algunos problemas con la gente, sin embargo, se puede resolver y negociar de manera satisfactoria. Para negociar los problemas, debemos estar dispuestos a identificar el problema, dejar de lado la culpa y la vergüenza, y se centrarnos en posibles soluciones creativas. Para negociar con éxito y resolver los problemas en las relaciones, debemos tener un sentido de nuestra línea de fondo y los límites, así que no pierdas el tiempo tratando de negociar asuntos no negociables.

Tenemos que aprender a identificar lo que tanto la gente realmente quiere y necesita y las diferentes posibilidades de trabajo que fuera. Podemos aprender a ser flexible, sin ser demasiado flexible.

Hoy, voy a estar abierto a la negociación de los conflictos que tengo con la gente. Me esforzaré para mantener el equilibrio sin ser demasiado sumiso o demasiado exigente. Voy a luchar por una flexibilidad adecuada en mis esfuerzos para resolver problemas.

Fuente: Clinica Ser