Las adicciones son una enfermedad a menudo mal entendida. La sociedad tiene una tendencia a considerar a los toxicómanos y los alcohólicos como una población desviada, perezosa, desmotivada, egoísta e indiferente. Sin embargo, muchas veces cuando uno mira más allá de la fachada a un adicto, se encuentra con frecuencia que el adicto está luchando en contra del abuso de drogas y el alcoholismo.
Muchos estudios y modelos médicos proporcionan evidencia de que la adicción es hereditaria, sin embargo, muchas de las estadísticas también indican que el abuso de sustancias y el alcoholismo puede ser una forma de automedicación para una persona que sufre de una enfermedad psiquiátrica o un trauma emocional. El término de diagnóstico dual se aplica a las personas que se ven afectadas por la dependencia química y los trastornos psiquiátricos/emocionales. En muchos casos, los síntomas de la dependencia química y la enfermedad mental se disimulan los unos a otros y como resultado pueden provocar diagnósticos dobles o una enfermedad compleja de identificar. Algunos de los síntomas del abuso de drogas y enfermedades mentales son la depresión, ansiedad, paranoia, delirios y alucinaciones.
Para quien está tratándose con un diagnóstico doble puede recuperarse por completo, ambos trastornos deben ser tratados de la misma forma. Una persona sin un diagnóstico doble intenta recuperarse de una enfermedad sin tener en cuenta la otra, como resultado la contribución a la recaída a la otra enfermedad. Ambas tienen la capacidad de afectar a una persona física, psicológica, social y espiritualmente. Una persona que deja de lado una enfermedad mental puede sentir la necesidad o el deseo de auto medicarse con drogas o alcohol en un intento de mitigar los síntomas de la enfermedad mental. Este escenario puede conducir a menudo a la hospitalización.
La negación es usualmente un problema inherente para el que sufre una adicción o problema mental. La persona afectada a menudo no tiene el conocimiento adecuado de la gravedad de su problema. Su forma de vida se vuelve normal para ellos. Aquel en quien hayan determinado con un diagnóstico dual debe ser consciente de la dificultad que hay en la recuperación de un problema de adicción y podría beneficiarse mucho de recibir tratamiento para superar su adicción.
Es esencial reconocer la gravedad cuando algún experto declara un diagnóstico dual. Mientras que la dependencia química y la enfermedad mental interfieren con la capacidad de una persona para funcionar de manera eficaz, es esencial tratar ambas enfermedades de forma simultánea. Cuanto más se aprenda del diagnóstico dual, más fácil es identificar el hecho de que el abuso de sustancias tiene una tendencia de ir mano a mano con otro trastorno psiquiátrico. Al igual que con otras enfermedades, una persona afectada con diagnóstico dual puede progresar y mejorar la propia condición, una vez que se reciba la atención adecuada.