Los padecimientos coexistentes o “morbilidad asociada” son aquellos trastornos o enfermedades que ocurren en la misma persona. Estas pueden suceder una después de la otra o al mismo tiempo y su interacción puede empeorar el desarrollo de ambas.

Es importante recordar que las adicciones cambian de manera fundamental al cerebro “interrumpiendo la jerarquía normal de las necesidades y los deseos, sustituyéndolos con nuevas prioridades relacionadas con la obtención y el consumo de drogas” según el National Institute on Drug Abuse. Esta capacidad de la persona para controlar sus impulsos aun sabiendo que pueden existir consecuencias negativas se ve disminuida, orillándola a comportamientos compulsivos, característica básica de otras enfermedades mentales.

Personas que sobreviven en las adicciones suelen recibir diagnósticos de otros trastornos mentales o al revés; como los toxicómanos, que tienen mayores probabilidades, de entre la población en general, de sufrir trastornos en los niveles de ansiedad o estados de ánimo pero que también puede ocurrir a la inversa: por tener dichos trastornos y no tener un diagnóstico de ellos caen en el consumo de drogas y en otras adicciones. La depresión es un ejemplo de esta relación que puede llevar al individuo al alcoholismo o a la drogadicción. En Clínica Ser® sabemos de esta relación de comorbilidad que debe ser tratada.

La depresión interfiere con la rutina y actividades diarias de quien la padece, es una enfermedad grave, común y debe ser tratada antes de que la persona incurra a sustancias tóxicas que lo lleven al alcoholismo u otras adicciones. En Clínica Ser® podemos ayudar a personas diagnosticadas con depresión o reconocer en ellas dicho trastorno a través de un diagnóstico oportuno. Existen distintos tipos de trastornos depresivos y se tienen identificados como los más comunes al trastorno depresivo grave y al trastorno distímico:

• Trastorno depresivo grave. Síntomas que imposibilitan a la persona a trabajar, comer, estudiar, dormir y vivir su vida de manera placentera.

• Trastorno distímico. Conocido como “distimia” sus síntomas, menos graves, suelen durar dos o más años y aunque no incapacita a la persona a realizar sus actividades ésta puede no sentirse bien o llevar una vida normal.

El hecho de que la drogadicción cause trastornos y éstos ocurran con otras enfermedades mentales, no quiere decir necesariamente que una causa a la otra. Incluso, puede resultar complicado deducir cuál de las enfermedades sucedió primero y el por qué.

Las enfermedades que llegan a coexistir con la depresión son:

• Trastornos de ansiedad: como el trastorno de estrés postraumático, el obsesivo-compulsivo, el trastorno de pánico, la fobia social y el de ansiedad generalizada.
• El alcoholismo puede ser coexistente con la depresión.
• Otras condiciones médicas como enfermedades cardiacas, derrame cerebral, cáncer, VIH, diabetes y Parkinson.

Es importante acercarse a profesionales para un adecuado diagnóstico y conocer la relación que usted o la persona cercana a su vida tiene con la depresión y el consumo de sustancias tóxicas. En Clínica SER® contamos con un equipo serio de médicos y especialistas que le pueden orientar en cualquier momento las 24 horas del día. No dude en contactarnos.