Soltar la mano a una persona adicta para que se haga cargo de las consecuencias de sus actos representa una decisión difícil, pero necesaria como parte del proceso. No hay nada más frustrante que intentar ayudar a un familiar adicto que no quiere ser ayudado.
Frente a la negación a tratarse, habrá que permitirles tocar fondo para poder vivir una experiencia de hartazgo y, desde ahí, que se tome la decisión de hacer un cambio de vida.
Un internamiento es útil por tres factores básicos:
- Protección. Cuando el ambiente familiar no es adecuado para el buen manejo del paciente durante su proceso de cambio.
- Intensidad. Una adicción no es algo que se puede tratar una vez a la semana o cada quince días al inicio por las consecuencias que genera el problema (familiar, social, económico, de pareja, laborales o educativos).
- Contención. Durante los internamientos, se pueden presentar momentos de crisis. Cuando existen altibajos en el proceso, es sumamente beneficioso el internamiento para brindar apoyo y evitar recaídas o consecuencias más severas.
No se debe ver al internamiento con una connotación negativa, muy pocas personas logran tomar una decisión consciente respecto a la calidad de su vida. Si ya se está considerando que es necesario un cambio, permítase guiar.
Es importante que la ayuda que reciba sea de especialistas en adicciones y que se les brinden las herramientas necesarias para su tratamiento.
En Clínica SER la AYUDA está LISTA.
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Mtra. Miriam Samour Nieva
Terapeuta en Clínica SER
Cédula: 11729330
